Si el lector de este post es peruano es imposible que no haya oído hablar nunca del guano de las islas, monarca absoluto de los fertilizantes mundiales que se obtiene de los excrementos de ciertas aves -llamadas así por extensión- guaneras.
Es más, si volvemos nuestra mirada al pasado, podremos observar que este peculiar abono se convirtió en la cornucopia dorada de la economía peruana y su principal fuente de ingresos a nivel internacional; tanto así que en el Perú existió una etapa comprendida entre 1845 y 1866 conocida como la Era del Guano, o La República del Guano.
Lo que seguramente no sepa el lector foráneo es que este abono es un producto 100% orgánico producido principalmente por aves marinas como el guanay, piquero, el pingüino, los cormoranes o el pelícano peruano a lo largo de las islas y puntas del litoral pacífico.
Por cierto, si alguno de los lectores de este post tiene pensado viajar a Pisco y Paracas como parte del tour de La Ruta del Gringo debe saber que en las Islas Ballestas puede divisar alguna de estas aves y pequeños islotes donde es muy divisable el guano.
Otro secreto del guano es que es uno de los potenciadores de la gran biodiversidad peruana, que basa su valor diferencial en otorgar al mundo una gran variedad de productos orgánicos.
El auge del guano de las islas
Es por ello, que desde hace algo más de una década el Estado peruano a través de Agro Rural -institución dependiente del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri)-, está realizando una serie de acciones para conseguir llevar el fertilizante al mayor número de familias campesinas del país.
De hecho la directora ejecutiva de Agro Rural, Jodie Ludeña, afirmó recientemente que este insumo "mejora los suelos y la calidad de los cultivos, además promueve una agricultura orgánica que les permita generar un valor agregado a sus productos y el acceso a nuevos mercados”.
El Guano de las Islas se presenta en forma de polvo de granulación uniforme, es de color gris amarillento verdoso y con olor fuerte a vapores amoniacales.
La idea de la institución pública es que este 2020 se recolecte una cantidad cercana a las 30 mil TM (una cifra algo superior a las 27.009 TM del pasado ejercicio), en las islas de Chincha Centro, Chincha Sur y en la Punta San Juan de Marcona en el departamento de Ica.
Durante el 2019 se comercializó un total de 28.715 toneladas, a través de los puntos de venta de guano de las islas autorizados de Agro Rural a nivel nacional o en convenio con otras entidades del estado.
El Minagri calcula en un incremento del 6% la cantidad recolectada del 2019 en relación al año anterior. La idea es que la recolección del guano siga creciendo y llegar a aumentar las exportaciones al exterior. Con la tendencia mundial hacia el cultivo orgánico no es una idea para nada descabellada que el guano de las islas pueda volver a ser conocido como uno de los mejores fertilizantes del mundo.
Reseña histórica del Guano de las Islas y la Guerra del Pacífico
El Guano, como ya hemos citado en párrafos anteriores trajo una era de prosperidad al Estado peruano, pero también una época de desgracias que originó la que sería la guerra más catastrófica de toda su historia: la Guerra del Pacífico que acabaría con el ejército chileno alzando su bandera en el mismísimo Palacio de Gobierno limeño.
Esta cruenta guerra que en un comienzo enfrentó a Bolivia y Chile tuvo que ver con el dominio de los recursos naturales de la costa Pacífica: el citado guano, pero también el salitre, formado por nitrato de potasio y de sodio, que se encuentra en las profundidades de los salares o lagos petrificados.
El salitre poseía, además de sus cualidades como fertilizante de primera categoría, las propiedades para la fabricación de la pólvora, lo que lo hizo aún más codiciado para el vecino Chile.
Si bien en un comienzo la Guerra del Pacífico comenzó por una disputa territorial y de impuestos en la región boliviana de Antofagasta, Perú se sumó por una alianza secreta con Bolivia que lo obligaba a entrar en armas en caso de que llegara el momento.
El 14 de febrero de 1879 las tropas chilenas desembarcan en Antofagasta y son recibidas por una población básicamente compuesta por trabajadores chilenos y con inclinación al dominio del país sureño. Es el inicio de la Guerra.
Una Guerra que acabaría el 20 de octubre de 1883 con tremendas pérdidas para Bolivia, que se queda sin su único acceso al mar (hasta ahora dura esa disputa) y para Perú, que pierde el Departamento de Tarapacá y Arica tras la firma del Tratado de Ancón.
Durante toda la Guerra del Pacífico se dieron miles de anécdotas, actos, traiciones, atrocidades (aún muy recordadas en la entrada del ejército chileno por Barranco); sin embargo no es la intención del blog ahondar en ciertos aspectos desagradables que traen todas las guerras, sin importar nacionalidades. Los actos de héroes nacionales como Francisco Bolognesi o Miguel Grau (conocido como El Caballero de los Mares), son conocidos por todos los peruanos e incluso reconocidos por los mismos chilenos aún en la derrota.
Existen películas como Gloria del Pacífico o una gran cantidad de bibliografía para el lector curioso que quiera saber más sobre esta guerra que enfrentó a tres países ahora hermanos en la costa pacífica.
Datos sobre el guano de las islas
El guano de las islas, pese a ser un recurso ya minoritario que no aporta grandes beneficios al Estado peruano, benefició el pasado 2019 a más de 13 500 familias de pequeños y medianos agricultores quienes hicieron uso del fertilizante principalmente en sus cultivos de café, cacao, papa, palta, maíz, entre otros.
La mayor parte de estos agricultores se ubican en los departamentos de Apurímac, Amazonas, Ayacucho, Cajamarca, Junín y Cusco, consiguiendo un total de 22,125 hectáreas abonadas.
Francis, Viajes del Perú
Febrero del 2020
info@viajesdelperu.com